Hace
tiempo que no escribo una mala crítica sobre una película, generalmente esto se debe a que me suele gustar (más o menos) lo que voy a ver al cine, y por lo general las películas de superhéroes me suelen dar lo que espero de ellas: entretenimiento y
acción. Por supuesto siempre hay excepciones que confirman la regla, y la
excepción esta vez ha llegado de manos de Batman v Superman: el amanecer de la justicia, que lejos de
entretener a su espectador más bien provoca que este quiera salir corriendo a su casa o a
por una coca-cola para evitar dormirse sobre la butaca que -no económicamente- ha pagado.
Obviamente,
como con todas las críticas que hago del cine basado en comics, hablo como mera
espectadora: ni leo ni sé de cómics, pero creo saber cuándo tengo una película
que merece la pena delante y cuando no, independientemente de que sepa si sigue al pie de la letra la historia creada por Marvel o por DC, en este caso.